Pues sí, podéis regocijaros todos porque.. ¡toca otra de libros! ¡Bieeeeen!

El primer libro con el que quiero aburriros hoy es Empress Orchid (Emperatriz Orquídea, aunque en español se llama La Última Emperatriz). Se trata de una novela basada en la última emperatriz de China, que fue regente desde 1861 hasta su muerte en 1908. Popularmente es considerada lo que en los circulos cultos se denomina un "bicho"; Riku apoya esta teoría, diciéndome que era una mujer malvada.
En el libro, sin embargo, se la presenta casi como una víctima, que tiene que luchar para escapar de su vacía y triste vida como una entre los varios cientos de esposas de un emperador débil y decadente. Y sí, habéis leído bien, cientos de esposas; que en el siglo XIX no tenían tele.
Como novela no deja de ser entretenida, y permite acercarse un poco a la historia de la China imperial. Aunque, en mi opinión, es tan útil para aprender historia como el Código da Vinci para aprender religión y ocultismo.

Vamos allá con el segundo. El libro que pueden ustedes contemplar a la derecha se llama "Nippon: la tierra y su gente". Nippon, como los más avispados ya habréis supuesto, es una de las multiples maneras de denominar Japón. Este libro contiene un compedio de información, datos, detalles, anécdotas y comentarios sobre la cultura, economía y política de este curioso país.
Por lo tanto, es un rollo.
La única manera en que conseguí terminármelo fue llevándomelo en el viaje Japón-España, y no llevándome ningún otro libro o entretenimiento.
Aún así, encontré varias cosas curiosas. Me quedo especialmente con una: se dice a menudo que Japón es muy pequeño. ¿Cómo de pequeño? A ver, que país es mas grande: ¿Japón o Francia? ¿Japón o España? ¿Japón o Alemania? ¿España o Suecia? ¿Rusia o Luxemburgo? Os dejo que reflexionéis sobre estas complicadas preguntas, y estoy seguro de que alguna respuesta (que podéis ver en la Wikipedia) os sorprenderá.

El último libro que quiero comentaros es "El curioso incidente del perro a medianoche". Este libro sobre un niño autista me gustó mucho; la trama está bien, la forma en que está escrito es curiosa y novedosa, y además es fácil de leer. Además, el protagonista no para de contar anécdotas sobre matemáticas y física, entre otras materias.
El que más me gusto es el que hace referencia a la columna que escribía la matemática Marilyn vos Savant. En ella se plantea el problema de Monty Hall, cuyo enunciado y solución podéis leer aquí.
La idea simplificada es la siguiente: estamos en un programa de televisión en que hay tres puertas; tras una de ellas hay un coche, y tras las otras dos hay sendas cabras. Elegimos una de las puertas. El presentador, que sabe lo que hay tras las puertas, abre una de las puertas y muestra una cabra. Tras ello nos ofrece, o bien mantener la puerta que hemos elegido, o cambiar a la otra puerta que aún esta cerrada. ¿Qué decisión deberíamos tomar? Dato: el problema presupone que preferimos un coche a una cabra.
En conjunto, este libro me pareció bastante bueno, y lo recomiendo a los que no lo hayáis leído todavía. Además no os tenéis que preocupar, vaguetes, que es bastante corto.
Como dato adicional, decir que los tres libros tienen algo en común. ¿Lo adivináis? Ahí van las pistas: el primero lo cogí de la librería de Schlumberger; el segundo me lo dieron al empezar la Vulcanus; y el tercero me lo leí en Algeciras, que lo había dejado Silvia. ¡Pues sí! Lo que tienen en común es que todos los libros... ¡los he leído gratis!
¡Un saludo y hasta pronto!